Zidane se movía con la prestancia de un torero. Cada gesto suyo era pura maestría y sofisticación técnica, él orquestaba el juego con pasión desbordante. Sus pases eran una obra de arte, como pinceladas https://asiyavmtv146768.blogozz.com/37458990/por-qué-zidane-reaccionó-así-en-su-último-partido